Genialidades

_Que difícil se hace Sir para mantener al pueblo servil y disponible. El vino funciona pero hay quienes no beben, sustituir la moneda por las cosas ha sido también útil puesto que dependen de ella por más que tengan artículos o propiedades, pero hay mucha más gente pobre que no tiene ni monedas. Bien sabéis que la educación no es para cualquiera por lo que no podemos adoctrinar a la mayoría. Los impuestos ya no pueden casi pagarlos, la religión nos favorece pero cada vez más también nos compite en poder. Las murallas casi no funcionan ya que la población ha crecido mucho, viven muchos fuera de las murallas y traen noticias de que afuera se está mejor, que aquello de los dragones y demás bestias es todo mentira. Los castigos corporales están siendo mal vistos ya no es divertido flagelar gente en la plaza. Habrá que pensar en algo que si bien no les de nada, les haga creer que son dueños o parte real de ello para que así, lo defiendan y sientan como propio; de esa forma podremos tener súbditos incondicionales sin dar nada a cambio, será pura ilusión para las masas…
Una semana más tarde el Sir llamó al asesor y le entregó una caja. _Toma, reparte esto y verás como satisfago tus peticiones. Adentro tienes instrucciones.
El asesor abrió la caja y encontró un rectángulo de tela a colores que decía –bandera-, un manuscrito que decía –himno nacional- una tiza enorme que decía –para trazar los límites (abajo muros) – y dos camisetas de colores diferentes que decían _ competencias deportivas-
Se puso a leer las instrucciones y exclamó –¡Es un genio!.