2020 será año cimiento de la próxima construcción de la civilización Humana sobre el planeta Tierra. La construcción de una civilización basada en el enajenamiento de la realidad universal y tangible, para consolidar el imperio de la virtualidad endémica… eso tan viejo de intra-muros.
La globalización comunicacional ha llevado a la desmaterialización de las fronteras culturales que una vez brindaban variedad y valor a una raza animal que había logrado prevalecer en un Planeta único dentro del sistema solar y tal vez de todo el Universo, con un ecosistema que no podría ser mejorado por ideario alguno. Lo que se asumió como la repartición del conocimiento crítico para la construcción de sociedades avanzadas se constituyó en la propagación del conocimiento condicionado al sistema de consumo masivo para la construcción de las sociedades imbéciles conformadas por los nuevos esclavos vocacionales ( más lindos, más limpios, más sanos…pero más esclavos)
En éste 2020 consolidamos los genocidios de las poblaciones colonizadas en el primer mileno, apoyaremos la resurrección de las cruzadas religiosas, esas guerras suicidas que tienden a sustituir el suicidio por la ambición de un Señor, al suicidio por la ambición del Señor. Daremos nuestro apoyo total a personajes como Don Altrán desde la información de las redes condicionadas que lejos de globalizar el conocimiento insultan el menor atisbo de inteligencia existente. Seguiremos siendo los gérmenes destructores del medio que habitamos mediante la contaminación masiva por miedo a realizar cambios necesarios e indiscutibles… que tan solo se discuten pero no se ejecutan de ningún modo. Seguiremos sin aceptar que no convivimos con éste Planeta, que vivimos en él pero existimos en un espacio virtual llamado consumo, estatus y éxito.
En éste 2020 seguiremos hablando de Arte como el producto más cotizado en el mercado de valores.., valores que otorga una cultura enferma en el dinero como único e indiscutible calibrador de la valía de lo que hoy día compone la cultura de la Humanidad. Transformaremos al arte, como aquella herramienta comunicacional que tiende a transmitir por medio distintos soportes los sentimientos y estados auténticos y espirituales de las distintas sociedades conformadas dentro de lo que se ha ido desarrollando como cultura existente, por una herramienta que desde la virtualidad y en ella, genera universos imaginarios por medio de los cuales evadir los sentimientos por medio de sensaciones, la coparticipación con la competición y el juicio crítico por la fantástica información difundida y condicionada a la programación cerebral existente.
EN éste 2020 comenzaremos a cambiar forzosamente las formas de alimentación y sedentarización dado el cambio climático. Pasaremos de conformar seres que buscaban el sueño de poder vivir de la mejor manera posible a ser seres que buscarán sobrevivir como se pueda y donde se pueda, cambiando la vocación hacia la esperanza por el stress de la constante amenaza. Dejaremos de soñar con días mejores por imposibles, para pensar en el día último por inminente e inmediato. Esto cambia radicalmente la conformación anímica y moral del la raza Humana constituyendo un nuevo orden social.
Este 2020 nos daremos cuenta por fin que lo del fin del Mundo, esa visión tan propia de dioses ególatras, es una utopía y que es solo el fin de la raza humana, lo que nos dará al menos un espacio de lucidez y tal vez de valía universal.
Todo esto pensando qué decir y si seguir con lo de: Feliz año nuevo…
