miércoles, 13 de junio de 2018

La revolución imprescindible

La revolución imprescindible no mata, no destruye, no es violenta. Mata quien no tiene argumentos, destruye el intolerante que no sabe construir y son violentos los que tienen miedo.

La revolución imprescindible no aprende y repite, desaprende y crea. No existe ni existió y por ello es una revolución; en otro caso sería una involución o mentira.

La revolución imprescindible se siente, no se piensa. Se ama no se desea. Yace en el epicentro del alma, no se descubre detrás de un best sellers o estampita.

La revolución imprescindible es la libertad individual porque solo aquel que desaprendió de libertades sabe que toda acción libre debe contenerse en un universo libre.

La revolución imprescindible es la individual porque no hay libertades comunes sin libertades individuales, porque no hay humanidad sin humano, porque los inventos sociales han caducado.

La revolución imprescindible es revolucionarte y no hay revolución más vital y válida que el amor, no hay arma más poderosa ni energía más potente que el amor.

La revolución imprescindible está en ti, la llevas dentro, tanto a las proclamas como el armamento; que es el amor el instrumento y dejarse amar el mayor de los enfrentamientos.

La revolución imprescindible no mata, enamora; no destruye, genera; no violenta, abraza; no acciona, perdura… porque haber desaprendido ha sido tan solo el comienzo.

La revolución imprescindible eres tú, tu amor, tu humanidad. Deberás si, desaprender y comenzar de nuevo. Deberás vivir con el corazón, dejarte amar y confiar en ti mismo… tan solo eso es la revolución.