Imprescindible

Duele vivir
simplemente porque desde su cimiente
el dolor impera…
Y no es ese, el problema de vivir.

Duele hasta el orgasmo
y las borracheras duelen
sin dejar nadie por ello
de ser borracho.

¿Si la longevidad es una meta
Porqué no lo es la alegría?

No han visto mis ojos jamás
más alegre mujer
que la que ha parido
con tanto dolor…

La alegría del atleta
al vencerse a si mismo
alcanzando el dolor extremo
que generan los límites físicos

No es al dolor
a lo que debes temer
es al vacío
y a la falta de alegría

A lo que ellos quieren
es a lo que debes temer…

A que vivas deseando lo que no existe
A que quieras ser quién no eres
A que tengas miedo a ser tu mismo
A que no te creas imprescindible…

Eres, ante todo, imprescindible.
Tú y aquello que tú eres
es lo imprescindible.
Sin ti, nada existe…

No eres una oveja del rebaño
porque simplemente no hay pastor.
Eso es un invento del Hombre
pero del hombre imperialista.

El otro Hombre,
el que llevas dentro,
dice que una vez que entiendas la libertad
entenderás la vida.

Para ser libre
hay que ser auténticamente alegre
y esto es como la risa
que se contagia.

Cuando aquello que te rodea
obtenga de ti
lo que tú necesitas de él…
Serás libre…

No te quieren libre
o imprescindible,
porque no te quieren a ti…
necesitan tristes ovejas para sus rebaños.


Simplemente por que son tristes hombres
buscando lo que no son.

Saben lo que es ser libres…
solo que desconocen la alegría
y solo obtienen de aquello que les rodea
la tristeza de vivir…

Y es esa la verdadera pobreza
a la que tanto temen
y confunden con el tener.

Aquel incapaz de crear
compra aquello que llaman arte.

Importa lo que importa

Mi piel
y su tela adherida,
mi único dinero.

De resto,
porto lo que soy,
que como tu,
no es más que eso.

Menos importas,
que tus telas;
e importo,
menos que eso.

Importa
el precio,
el tener,
el dinero.

Es importante
solo aquel que importa;
y quieren todos
importar.

Aprendí a vivir
cuando hice de mi piel
y su tela adherida,
mi único dinero.

Cuando dejé de importar
a aquellos que sólo les importa,
lo importante
para ellos…

¿Porqué tú?

Sea esta,
tal vez,
mi ultima noche…
o la tuya.

Y ella
andará en la luna
su mirada ingenua,
desde la ceguera.

Amanecerá mañana
tan lila el cardo,
tan verde la pradera,
tan Ruíz mi Pablo.

De no estar tú,
amanecerá también mi llanto;
de no estar yo…
¿a que tú le hablo?

Yo aquí
hasta en mi nombre,
tu tantos…
hasta que ninguno.

Ella
es a quien yo dibujo,
tu
detrás de tus cristales eres.

Sea esta,
tal vez,
mi ultima noche…
o la suya,
porque que tú
a mí no perteneces.