sábado, 18 de julio de 2015

No hubo nada

No hubo nada
más que la muerte
aquel día
en playa recuerdo
y surcó el horizonte
una lágrima de
de cuero
en el parque
del olvido
No hubo mucho más que hablar
porque sencillamente
no había nada que decir,
era cotidiano
ya que la hipocresía
había germinado ya
en su mente.
Nadie extrañó
la falta de criterio
o la incapacidad de
juicio crítico…
simplemente
se incorporaba
a lo socialmente
aceptable.

miércoles, 15 de julio de 2015

No llores mi niña...

No llores mi niña
¡No tú…tú no llores..!
Que no has iniciado siquiera
tu andar en la vida…
Lanza piedras al viento,
desgarra un trozo de tela,
discute si quieres o ¡Grita..!
Pero no llores.
Aprende, entiende y anticipa;
valora, cierne y actúa.
Traga la última saliva
como un manjar selecto,
sueña con los harapos
que hoy te cubren,
como si fueran de diseño
o llénate de dulces,
cocinando en tus sueños…
Pero no llores…
No llores mi niña,
no tú… ¡Tú no llores..!
Derramarás la gota última,
de ésta vida,
que verán esos traidores…

La vida...



No te decepcionaré, y menos aún…no te traicionaré.

Te miro a los ojos y te lo repito. Seré lo que te prometí sería.

No me dejaré influenciar por la agónica mayoría, que como desahuciados a morir ahogados en un mar de indiferencias, tienden a hundir a los rescatistas por puro instinto. No seré aquello que no obedezca al instinto primario que nace desde mi esencia. No defraudaré aquello que pactamos al comienzo de nuestra relación, cuando nos vimos por primera vez y nos descubrimos una única e inseparable entidad. No te pondré precio, solo valor. Lo que es igual a no canjearte en el mercado de la prostitución ciudadana y solo valorarte por cada sonrisa que regales a la humanidad. No te despreciaré cómo hace la dictadura mediática sumida al consumo. Te adoraré único y cuanto más auténtico más tolerante con el resto, porque es ese el fin último de la autenticidad…la tolerancia. Desde el momento que te asumes diferente respetas la diferencia y la aprecias. No dejaré de defender la equidad y la equivalencia entre los Hombres, y no apoyaré el disparate de la igualdad que no existe, porque no somos iguales y gracias a ello somos únicos e irrepetibles. ¿Qué sería del Mundo sin la diversidad? Seguramente lo que desean que fuese, aquellos que temen perder sus posesiones... solo aquello que se tiene se pierde, lo que se es, nunca puede ser despojado al individuo. Por ello temen a lo diverso, lo cambiante y al amor; porque no hay argumento válido para la violencia ni la avaricia...Mediocres temerosos que deben dominar hasta el pensamiento para mantener sus posesiones. 

Tenemos los mismos derechos y obligaciones, pero gracias a la vida, nunca seremos iguales…y éste pensamiento está mas dirigido a las minorías ocultas que a las mayorías evidentes.

Seguiré buscando el amor por más que en cada esquina se me intente convencer que es una quimera. No dejaré de hacerlo, por que dos hijos me han mostrado que es cierto y que puede existir más allá de ellos. No dejaré de confiar en mí antes que en nadie, ni dejaré de aceptar que suelo ser el primero en equivocarme y que los demás confíen en si mismos favorece mi posibilidad de acercarme a la sabiduría, escuchando y aprendiendo. Quiero aceptar que no lo se todo y así, poder escuchar al otro y seguir andando junto a. Debo ya, leer menos para dedicar ese tiempo a escribir, comprender que somos ya el hoy. Entenderé que la obesidad no corresponde únicamente a las grasas corporales, también lo es con iguales consecuencias al exceso de bienes materiales. Lloraré cuando lo desee, porque es mi deseo mayor necesidad que mi imagen.

No te defraudaré, tienes mi palabra y así, si tu tampoco me defraudas, podremos seguir juntos el camino que un día decidimos recorrer…la vida, nuestra vida.

Así esa noche, después de un día agitado, apagué la luz, dejé de hablar al espejo y me fui a dormir…