miércoles, 8 de febrero de 2017

Lluevo...


Albergo la siesta de los paréntesis,
el nudo de los silencios,
el bostezo de los recuerdos,
el aroma de las sonrisas...
Dudo ante la pena que se moja
y me despojo de oídos...por distraído.
Lluevo, y me verbalizo a mi antojo.
Quiero querer, amo amar, odio odiar...
Me supongo vivo ante tu duda
y dudo cuando me supones.
He muerto muchas veces
y seguiré muriendo tantas otras,
por mirar más allá de ese episodio
tan corto como tantos otros,
por no dogmatizar las palabras,
por no pregonar fe en éste caosmos
que solo sabe de causas y asares…
y de amor, tan solo de eso.
No doy crédito a quien solvencia económica tiene,
ofrezco tiempos a quién guste oler la lluvia,
a quien haya olvidado su reloj por una sonrisa.
Escucho al niño si quiero saber,
lo observo si quiero aprender,
y juego con él, si quiero vivir.
Son los niños mi bandera
porque no hay amor sin mañana…
Soy tan solo yo
y me sobra por tan limitado
al ver las estrellas en el espacio,
el alcance de un beso,
la inmensidad de un abrazo,
la necesidad de que existas,
la pequeñez de mi regazo.
Albergo la siesta de los paréntesis,
lluevo, y me verbalizo a mi antojo,
soy simplemente poeta…


martes, 7 de febrero de 2017

He buscado dejarte poesía...

He buscado dejarte poesía…
Traes a mi los ramales secos de la posguerra,
el cuerpo a tierra,
la sangre seca de las Américas,
la de la tierra a los huesos,
de la tortura por complacencia,
y el hedor a la miseria…de toda ella.
Traes al amor, que junto a mi amanece cada día
aquel que acompaña y tizna,
que inyecta aire en tanta pestilencia…
y a aquel otro también, que muere día a día,
bajo los parpados caídos del resto que no mira…
No me encuentro al no verte,
ni me huelo siquiera si te alejas…
He buscado dejarte poesía
para andar más ligero de equipaje,
oliendo flores en los parques,
viendo sonrisas en los vendavales.
Quise pintar de rosas los negros maizales
donde los cuerpos de la memoria
crujen bajo el miedo que los deshace…
Me duelo de tanto tú hacerme
y hasta me despisto en frases indecibles
para ver si desapareces, poesía…
y siempre allí quieta esperas
mi llegada a ti,
desde el hospicio de la llamada cordura
que insulta el más mísero indicio de amor.
He buscado dejarte poesía,
y me duele hasta el acento…
He buscado dejarte
y solo logro verte por dentro
cuando abrazado al amor
transito estos infiernos…

Se aprende...




Se aprende a escribir pero no a ser poeta porque no todo es estructura definible...
No necesito espacio para desplazarme...me basta tan solo el silencio de un segundo.
Tu nacimiento sea tal vez la única acción de tu existencia de la que se te pueda eximir de responsabilidad...hasta de tu ignorancia eres responsable. Únicamente de los miedos te disculpa la vida...lo que no quiere decir que no te responsabilice de sus consecuencias...

lunes, 6 de febrero de 2017

vivimos


Vivimos en una sociedad evolucionada en el miedo e involucionada en lo que a libertad refiere. Manejamos máquinas y aparatos de ultima generación y razonamos desde estructuras filosóficas de la antigüedad y conceptos sociales neoclásicos. Somos, patéticamente, esclavos que imploran no ser liberados, con pánico a tener que ejercer la responsabilidad de vivir desde nuestra autenticidad. Nunca la humanidad fue tan pobre... y nunca el pobre fue tan humano.