Pinceladas de Marco

...Por ende, y una vez dejado de lado el concepto de ser una unidad de materia sólida e inseparable, entendemos que nos mimetizamos en todo el Universo por que somos “transparentes” como él mismo...

Saturo el aire

Saturo el aire de agua y sal
resecando hasta el ocaso
que se aproxima inexorable
y me deslizo al vientre
de lo nunca habido…
prosiguiendo casi atónito,
en un intento de estar
hasta “Crísticamente” exhibido,
para preguntar a la noche
porqué robar la luz
para ver la distancia.
Qué se dibuja
en la mirada última,
que distrae la rutina
de aquellos,
que han escuchado alguna vez
el eco de la vida misma
en las cavernas ciudadanas.
Para que pensar qué escribo,
si no pienso aquello que siento
que es lo que intento,
repose sobre el blanco que agredo…
Al alcohol miro siempre
con recelo,
en un ¡basta ya!
de esclavo y mas aún,
que aquellos grillados al destierro.
La micronésima alegría de Mario
pasa sin dar aviso
y yo por distraído
me pierdo hasta su silueta…
Pero encuentro en cada sílaba,
átomo o molécula,
cada brillo o mueca,
una razón de existencia,
aunque sea tal vez y solo
el llorar tu ausencia,
añorar aquellos días
y variar de sentencia.
No es la historia que regresa,
es amor… solo amor,
que a memoria se expresa.
Porque no sabe de olvidos
quién haya alguna vez
amado con certeza…
Saturo el aire de agua y sal
resecando hasta el ocaso
que se aproxima inexorable,
me deslizo al vientre
de lo nunca habido…
y prosigo atónito,
en un intento de estar,
aún poeta,
aún vivo…