viernes, 8 de marzo de 2024

Hoy, que los días de lluvia no me mojo

 

Hoy, que los días de lluvia no me mojo…me lluevo. Que el dolor no me sorprende…lo duelo; y la noche no es un final de día, porque no es la luz mi miedo, ni por verme o no verlo. Hoy, que las repeticiones se repiten, las palabras no me consuelan…que alcanzo lo inalcanzable y no alcanzo nada, que hablo desde el saber con la convicción de la ignorancia más absoluta porque sé… La luz asoma y espera mi sonrisa, el beneplácito de mi existencia, la agonía de las horas que asechan la vida y que buscan aplacarla, encerrarla cual cotidiana madriguera… la luz asoma y yo en ceguera.  Mi hermana, la muerte, que ya no espera…acompaña… este mar de violencia acompaña, mar de muertos, niños muertos acompaña, porque no es ella asesina, es tan solo muerte y avergonzada transita junto a los asesinos que somos…de los que se muere de pena…porque hasta a la muerte hemos bañado de violencia…Dante quemaría su infierno, por ingenuo.   Hoy, que los días de lluvia no me mojo…me lluevo. Que el dolor no me sorprende…lo duelo; y la noche no es un final de día, porque no es la luz mi miedo, ni por verme o no verlo... ¡Lo veo!…Nos veo… muere hasta la poesía ante lo Humano que veo, dejo el alma sobre el estiércol y voy hueco, desarmado y seco. Es tanta la ignorancia cómoda, el dolor infligido, la avaricia devoradora y el materialismo…que se confunde el amor con el tengo. Me pidió la muerte que la matase, ella no sabe de suicidios… la llevo a tomar unos vinos, hacer memoria y buscar nuestros reencuentros…

No hay comentarios: