No hay que utilizar arma alguna.
No hay que asesinar a alguien.
No hay que atentar contra nada.
No hay que dinamitar edificios.
No hay que secuestrar a nadie.
No hay que torturar a ninguno.
No hay que discriminar por raza.
No hay que empaparse de violencia.
No hay que ser agresivo ni inquisidor.
Todo esto es simplemente la contra-parte de aquello
otro.
Hay que simplemente no ser combustible para
esa energía negativa.
Hay que amar y responsabilizarse del lugar
que ocupa cada uno en la sociedad que habita.
Hay que volver a hablar con el vecino y
dejar de escuchar fantasmas.
Hay que saber primero lo que no quieres
antes de aceptar lo que te ofrecen.
Debes respetarte y amarte a ti antes de dar
las riendas de tu vida a un fantasma.
Hoy la revolución es revolucionarse.
Quien piense que la revolución es
violencia, no es más que combustible para la intolerancia.
El virus de la Humanidad hoy día es la
ignorancia y sobretodo, la ignorancia de uno mismo.
LETRA DE CUATRO PESOS DE PROPINA
“Hoy que es tiempo de ser luz
esa es mi revolución
Llenar de amor mi sangre
y si reviento
Que se esparza en el viento
el amor que llevo adentro
Esa es mi revolución”
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